La Guardería Municipal comienza un nuevo curso y el alcalde de Bailén, Luis Mariano Camacho, acompañado de
la concejal de Educación, María Teresa Risueño, han visitado las instalaciones de este centro con capacidad para
104 niños. “No sólo hemos podido comprobar el perfecto estado de la Guardería, sino que también hemos
podido valorar con la dirección el maravilloso trabajo que realizan los profesionales”, ha destacado el primer
edil.
Al respecto, ha enfatizado que “no es sólo un trabajo, sino un servicio muy necesario que prestan a las familias
de Bailén” y que “se verá beneficiado con la implantación de la gratuidad en la educación de los 0 a los 3 años
por parte del Gobierno de la Junta de Andalucía”.
Por su parte, la concejal de Educación, María Teresa Risueño, ha explicado que este curso la Escuela Infantil “se
adentrará en el maravilloso mundo de ‘El bosque encantado’ para disfrutar nuevas aventuras, descubrir nuestro
mundo y crecer en todos los aspectos sanos, creativos, responsables, trabajando en equipo, respetuosos con el
medio ambiente y sus compañeros y, sobre todo, felices en un ambiente cálido, seguro y familiar”.
El centro
En la Guardería Municipal se imparte el Primer Ciclo de Educación Infantil y tiene capacidad para 104 niños.
Entre los servicios que presta destacan el aula matinal; servicio de atención socioeducativa; comedor y aula de
tarde, ofreciendo su servicio desde las 7.30 a las 17.00 horas.
El centro cuenta con siete aulas preparadas para cada edad y tres patios privados, así como instalaciones
adaptadas para personas con discapacidad y cocina propia con menús adaptados a cada edad y necesidad.
Además, basan su labor diaria en una atención continua e individualizada al niño, tanto en los aspectos
educativos como en los asistenciales, apoyándose en una relación de colaboración con los padres y en un
intercambio de formación continuo con los mismos.
Tal y como ha destacado Rosa María Muñoz, directora de la Escuela Infantil, “nuestro modelo educativo se
encamina a inculcar a nuestro alumnado los valores que imperan en una sociedad democrática, donde la
escuela se caracterice por ser pluralista, integradora y arraigada en su entorno, creando una escuela para la
vida en la que se aprenda a través de las experiencias que allí se puedan disfrutar, sentir y compartir. Todo ello
orientado a la consecución de la formación de personas felices, creativas, críticas, respetuosas, solidarias, que
disfruten y sientan placer, aprendan, se desarrollen y crezcan.”